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viernes, 2 de enero de 2015

Año nuevo, ¿vida nueva?

Es habitual que cuando está terminando el año hagamos un balance de cómo nos fue y cuanto de lo proyectado pudimos llevar a cabo. La llegada del nuevo año renueva las esperanzas y propone nuevos objetivos. Hacer un balance es una herramienta para organizar los deseos que uno desea que se cumplan y tambien ver cuán capaz ha sido de llevarlos a la práctica. Es la ocasión ideal para sacar a la luz nuestros sueños, estimular la imaginación y alargar los horizontes en cualquier aspecto que sea. El problema aquí tiene que ver con las expectativas de cada uno. Hay personas que se ponen metas inalcanzables y que ellas mismas saben que son imposibles de llevar a la práctica para si, simplemente para seguir sosteniendo sus creencias; por ejemplo alguien que se siente poco inteligente se imagina siendo profesor universitario, o aquel que no se anima a salir de su casa, se propone hacer un viaje alrededor del mundo. Fundamentalmente en este ejercicio anual debemos reflexionar y ver hasta donde pudimos llegar, pensar si con el nuevo año nos animamos a mas y que instrumentos vamos a implementar para hacer realidad nuestros proyectos. Si bien el balance es casi obligado cuando llega fin de año, no necesariamente es conciente o verbalizado, pero sí permitir darse espacios de reflexión y decidir si uno quiere seguir con su vida tal como está actualmente o no. Esa es una manera de hacer una introspección y abrirse al cambio; luego hay que animarse a ir por mas y no quedarse en la mera fantasía. En realidad cuando suena la campanada de las doce de la noche nada cambia y sin embargo, todo cambia, porque el 31 de diciembre de cada año marca el fin de un año y el nacimiento de uno nuevo y con ello se renuevan las esperanzas. De todos modos nada cambia en una noche y tanto nuestras alegrías como las penas están ahí, se trata más bien de un pasaje simbolico que tiene su importancia. Esto es asi porque el ser humano tiene necesidad de pasajes de ritmos y alternancias para continuar. Hablamos por ejemplo de la alternancia entre el día y la noche, las semanas, los meses y un año que termina y otro que comienza, todo eso marca un ritmo y nos permite una ubicación temporal sobre nuestro alrededor y nuestra existencia. El pasaje a un nuevo año también nos inscribe en una dimensión universal dentro del calendario gregoriano, porque concierne a toda la humanidad. Aunque existen otros comienzos de año como el año nuevo chino y el año nuevo judío, estas tienen más que ver con celebraciones restringidas a una comunidad. Además nos relaciona con un sentimiento de pertenencia a la comunidad mundial. El año nuevo nos remite a una necesidad de proyectar y resolver favorablemente situaciones que a lo mejor pudieron solucionarse antes. El año nuevo actúa como un poderoso renovador de fuerzas para decirse, “año nuevo vida nueva” y este cambio de calendario nos impulsa y permite ordenar el tiempo y decidir entre un antes y un después. El pasaje de un año al otro genera en alguna medida una transfusión de energía. Todos estamos sometidos a un tiempo que inexorablemente avanza y nos conduce inevitablemente hacia la muerte, pero el comienzo de año nos da esperanzas del nacimiento de otra vida, como si se tratara de alguna manera de un renacimiento. Arrancar un nuevo año es en cierta forma darse un poco de eternidad. Se escucha mucho entre los pacientes y en la comunidad en general decir “Que suerte que este año está terminando… voy a dar vuelta la página y empezar de nuevo” Todos tenemos necesidad de dar vuelta la página, de cerrar algunos cajones y decidir que ciertas situaciones ya pertenecen al pasado. Un nuevo año responde a estas exigencias y nos ofrece esperanzas de una vida nueva. “Comenzar un nuevo año, es pensar en algunos momentos de eternidad”.

domingo, 11 de abril de 2010

STRESS Y RESILIENCIA

Que es el stress?
Toda sensacion que pone al organismo en estado de alerta, nos pone mas vigilantes, tensiona los musculos, acelera la respiracion y la circulacion, aumenta el metabolismo, etc. constituye una situacion de stress De esta manera estamos preparados para disfrutar, combatir o huir.
Hans Selye fue quien dio a conocer la nocion de stress y distingue dos modalidades :
o el stress positivo, favorable, o « eu-stress » y
o el stress négativo, desfavorable o « destres ».

El estrés negativo es uno de los factores de riesgo más importante. Se manifiesta tanto con problemas cardiacos, hipertensión arterial, cáncer, diabetes, alteraciones metabólicas y hormonales. El cuerpo desarrolla distintas habilidades para adaptarse a los estímulos a que es sometido por su entorno, por medio de cambios internos, que incluyen, entre otras cosas, la liberación de hormonas. Queda claro entonces que el stress está dentro de nosotros, y es la forma en que cada uno desarrolla esas habilidades para adecuarse al medio la que va a dar como resultado un stress positivo o negativo. Ahora bien, muchas veces, confundimos la causa con el efecto y se intenta combatir el estrés luchando contra él, sin ir a las causas, de ese modo en ese derroche de energía solo se logra aumentar el estrés inapropiado.

Cuales son las características del stress?
Selye describió tres formas clásicas de la respuesta orgánica:
1. Fase de alarma (primitiva respuesta de preparación para la lucha o la huida).
2. Fase de resistencia.
3. Fase de agotamiento neuro vegetativo.

En la fase de alarma hay respuestas fisiológicas en los sistemas circulatorio, muscular y nervioso central. Se observó que en las respuestas tanto a estímulos internos como externos participan procesos emocionales y psíquicos.
El estrés es entonces, la respuesta del organismo a una demanda real o imaginaria, o simplificando aún más, es todo aquello que nos obliga a un cambio. Las situaciones estresantes llamadas estresores que pueden causar el cambio o adaptación son de un espectro enorme. Desde el enojo transitorio a sentirse amenazado de muerte. Desde la frustración o la angustia al temor que nunca cede. A veces la causa difiere enormemente. Un divorcio es normalmente muy estresante pero una boda también puede serlo. El fallecimiento de un familiar produce estrés pero también un nacimiento. Tanto el estrés positivo (eustrés), como el negativo (distrés), comparten las mismas reacciones pero en el caso del negativo estas respuestas quedan detenidas en la posición de funcionar permanentemente.

Consecuencias del estrés
La respuesta del organismo es diferente según se esté en una fase de tensión inicial en la que hay una activación general del organismo y donde las alteraciones que se producen ceden fácilmente, si se suprime o mejora la causa, o en una fase de tensión crónica o estrés prolongado. Aqui los síntomas son permanentes y desencadenan la enfermedad.
Quiero marcar que el estrés no es un problema asociado únicamente al trabajo, ya que también existe fuera de él. Tambien está asociado con la vida doméstica, las responsabilidades familiares, civiles, etc. Dichos factores pueden interactuar de forma positiva o negativa con los elementos estresantes del entorno laboral y, por tanto, afectan en general, a la calidad del trabajo, la productividad y la satisfacción. La tensión psíquica que producen ciertas ocupaciones o modos de vida en numerosas personas hace que estén en permanente estado de vigilancia. Puede producirse en forma temporaria en ocupaciones con frecuentes exigencias temporales o como una forma de vida. Esto puede llevar a una sensación de atrapamiento, fracaso, pérdida del control y de la autoestima. Tambien aquellos que no tienen trabajo pueden sufrir de stress negativo.

Mecanismos desencadenantes
Por lo general hay un desajuste entre las expectativas y la realidad que ofrece el mundo en que se vive. El stress se produce por la inadecuación entre las expectativas y la realidad.
El cuerpo reacciona ante estos estados con mecanismos que al principio constituyen una adaptación, pero que, ante la reiteración y la frustración de no poder contrarrestarla se transforman en cuadros de enfermedad orgánica y/o depresión psicológica.

Para estresarse menos es necesario modificar el estilo de vida. Es decir, poder preguntarnos que pasa con nosotros que tenemos esta modalidad de vinculo en donde nos exigimos mas de lo que podemos.

El burnout
El burnout, “estar quemado” o desgaste psíquico en el trabajo, “es el resultado de excesivos esfuerzos por alcanzar alguna expectativa poco realista, impuesta por uno mismo o por los valores de la sociedad”. Hay un estado profundo de agotamiento, producto del trabajo intenso y de la postergación de las necesidades personales.
La persona que acostumbraba ser la más activa y la que más participaba en las reuniones de equipo ahora no dice nada; sentada en una esquina de la mesa parece resentida, desencantada, fatigada, aburrida, desanimada y confusa. Está tensa, se irrita con facilidad, se frustra con las cosas que normalmente serían de importancia moderada”.
En el caso de la fatiga el sujeto se recupera rápidamente una vez logrado el descanso físico y mental mientras que en el “quemarse” no se recupera fácilmente. La ansiedad está considerada como parte del “quemarse” ya que puede evolucionar con síntomas de aprehensión, tensión, malestar o desasosiego que experimenta el sujeto al anticipar el peligro especialmente cuando el origen de éste es desconocido. Por lo tanto la ansiedad puede ser entendida como parte de la respuesta al stress y además ser considerada como un rasgo de personalidad.

Crisis
Una “crisis” es un suceso que causa alteraciones intensas en las personas. Si excede su capacidad de respuesta se denomina “desastre”, en caso contrario “emergencia” Toda crisis implica una amenaza y vulnerabilidad. Pero en chino contiene dos símbolos: significa PELIGRO y OPORTUNIDAD. Toda crisis implica dos fenómenos simultáneos: cambios y pérdidas. Los cambios generan estrés, Uno de los factores de buen pronóstico es una buena red de apoyo social, que disminuye la probabilidad de padecer el trastorno, la gravedad de su presentación y el tiempo de recuperación. Para reducir el estrés se han utilizado distintas técnicas que resultan eficaces y por supuesto una terapia para poder entender la modalidad de vinculo tanto con el trabajo como en otros ámbitos.

Ademas para el sistema neoliberal en que vivimos, el tiempo laboral dirigido a producir materialmente es el mas importante; y es una de las actividades más estructurantes y dadoras de sentido para el ser humano. En cambio, el tiempo “libre” sólo es importante en la medida en que se descansa para quedar en condiciones de volver a producir. Se descalifican entonces las actividades dirigidas a llenar las demás necesidades humanas, de afecto, participación, ocio, creación, identidad y libertad.
La Recreación entendida como “un proceso de acción participativa y dinámica que facilita entender la vida como una vivencia de disfrute, creación y libertad, en el pleno desarrollo de las potencialidades del ser humano, para la realización y mejoramiento de la calidad de vida individual y social”. Es decir, como un proceso que involucra a todas las esferas del ser humano, que es en sí mismo placentero y cuya finalidad es el desarrollo humano y social.
El estrés, los problemas, las cosas que no nos salen como hubiéramos deseado, son parte de la vida cotidiana y mientras más nos adentremos en estadios avanzados del ciclo vital, más complejos resultan.
Entonces el asunto no radica en ignorar o evitar el estrés, sino en la forma en que lo afrontamos y que incluye lo que pensamos, sentimos o hacemos o dejamos de hacer, cuando algo nos lastima, nos amenaza o nos desafía.
Un problema puede ser: una crisis existencial o familiar, una crisis financiera o una salud resquebrajada, … y puede ser las tres cosas al mismo tiempo.

La autoestima y el manejo del stress
Una autoestima alta, donde la persona “se quiere” y se ve a si misma como valiosa y querible hace que se perciba como capaz de resolver los problemas, aún aquellos que otros consideren insolubles, y por ello los afronta persistentemente con esperanza y optimismo. Y por el contrario, una autoestima baja lleva a la creencia de que uno tiene poco o nada de valioso, que no puede hacer nada bien y esta creencia negativa se valida cuando se convierte en “profecía autocumplida”, por el pesimismo con que se afrontó la situación estresante desde el principio.
Pero una cosmovisión positiva no se restringe a las creencias sobre si mismo, sino que incluye también creencias positivas sobre los demás y la existencia misma. Cuando una persona construye su existencia sobre la base de “no creer en nada ni en nadie”, poco éxito puede tener al afrontar los problemas de la vida cotidiana, pues queda muy poco espacio para la esperanza y el optimismo que sustentan, en gran medida, el esfuerzo y la perseverancia que una persona pone para sortear los problemas de la vida cotidiana.
Hay un número importante de personas no sabe como disfrutar de manera sana y estimulante de sus momentos de ocio. Desarrollar habilidades para la práctica sana de actividades de diversión y de recreación, es uno de los factores contribuyentes al bienestar y la salud mental de los individuos.
Sucede a veces que agobiados por el intenso ritmo de las actividades cotidianas, no encontramos lugar o sencillamente nos olvidamos de practicar y desarrollar nuestras habilidades para procurarnos de manera sana, creativa y estimulante momentos de diversión y recreación.
Cuando una persona ha desarrollado la capacidad para divertirse, ya sea en compañía de su familia y amigos, en diversos ambientes sociales y también en soledad; además de poder comportarse de manera autónoma se convierte en un sujeto más atractivo con quien otros desean compartir su tiempo.
La manera más efectiva de utilizar nuestro ocio, es aquella que nos proporciona diversión y contribuye además a nuestro desarrollo personal; ambas metas no resultan incompatibles. Un adulto puede, al igual que hacen los niños, aprovechar los aspectos lúdicos y divertidos de determinadas actividades para al mismo tiempo aprender con ellas.
Puede resultar que nuestra creatividad, iniciativa y habilidad para procurarnos distracción y recreación se encuentren algo limitadas, y que en nuestro repertorio sólo aparezca un reducido número de actividades que realizamos de manera rutinaria y con un nivel fluctuante de disfrute, por ejemplo, ver los mismos programas de televisión, jugar al dominó, tomar unos tragos con los amigos y conversar con ellos sobre los mismos temas...
Se trata, en primer lugar, de romper con la rutina y permitirnos la experimentación de nuevas y variadas actividades solos y en compañia de nuestra familia y/o amigos.
Esto contribuye a desarrollar la comunicación, la cohesión, la cooperación entre los miembros de la familia, e incrementar el deseo de disfrutar y compartir el tiempo en conjunto.

El stress en el trabajo
Enfermedades diversas o problemas psicosomaticos
Incremento de accidentes
Ausentismo laboral o bajo rendimiento.
Incapacidad laboral por alteraciones somáticas o psicológicas. .
Depresión.
Aburrimiento.
Baja tolerancia a la frustración
Abuso de drogas.
Disminución de la calidad de vida personal.

Programas preventivos
Las empresas y organizaciones pueden adoptar actitudes muy diferentes ante el estrés:
Algunas lo desestiman y no le prestan ninguna atención al problema, y van mas alla al
utilizar al estrés como medio para forzar a los trabajadores, suponiendo que van a ser más productivos.
Otras en cambio, reconocen el problema y la necesidad de intervenir; Aquí la acción se puede dirigir a las consecuencias negativas instauradas, o bien realizar programas dirigidos a reducir las causas producentes del estrés.
Se trata sobre todo de incrementar la capacidad de resiliencia de las personas.

Resiliencia
Resiliencia o Resistencia proviene de resilio que quiere decir volver atrás, recuperar la forma original. Es la capacidad de ADAPTACION que tienen algunas personas que permite hacer frente a las adversidades de la vida, superarlas e incluso ser transformadas por ellas. Intenta dar cuenta de las causas por las cuales, sujetos que sufrieron situaciones muy adversas en su niñez, lograron como adultos una vida social adecuada.

Que hace que una persona sea resiliente?
Algunas características de personalidad y del entorno, como la seguridad en uno mismo y en la propia capacidad de afrontamiento, el apoyo social, tener un propósito significativo en la vida, creer que uno puede influir en lo que sucede a su alrededor y creer que se puede aprender de las experiencias positivas y tambien de las negativas, etc.
Lo importante es que estas situaciones que fueron críticas y traumáticas como asaltos, accidentes, pérdidas, catástrofes, etc, pueden ser elementos de aprendizaje, crecimiento y superación humana.. La resiliencia apunta a mejorar la calidad de vida de las personas y la existencia en un sentido integral, tiende a un reconocimiento de la propia fortaleza del individuo, a la capacidad de superación que tienen las personas.

La habilidad de “hacer” con lo que se tiene: Es la habilidad de inventiva y flexibilidad para poder improvisar soluciones a uno o varios problemas, con las herramientas disponibles en ese momento. Esto permite desarrollar el proceso que transita el camino que va desde la Realidad del Hoy hasta el futuro que nos muestra los nuevos objetivos del mañana, y a hacerlo con lo que contamos.