miércoles, 12 de octubre de 2011

Falta de confianza en si mismo

En nuestra infancia se consolida o no la confianza en uno mismo y en esto la actitud de nuestros padres marca una tendencia, aunque no es completamente determinante.
En el consultorio se escucha como motivo de consulta este problema presentado de diferentes formas, por ejemplo “soy timido, no se decir no, me siento juzgado siempre por los otros, tengo el sentimiento de no ser querido, ni merecerlo”, etc.
Que quiere decir que alguien no se tiene confianza?, En este caso el paciente revela que algo anda mal con relación a si mismo o con los otros, sea en el amor, en el trabajo o en el vinculo con los otros, es decir que las cosas no funcionan y explican que eso es así porque no se tiene confianza. De todos modos, esta verbalización, no tengo confianza el mi, es siempre el producto de una historia singular, porque no se nace tímido o acomplejado, es un producto, quiero decir que se va haciendo.
En todos los casos hay un punto en común que es la relación particular que se establece con los padres, y a partir de ahí van a surgir elementos que van a dar lugar a esa falta de confianza. Claro que hay muchas actitudes de los padres, conscientes o no, que van a dar lugar a determinados problemas, pero esto no quiere decir que eso vaya a dar lugar a un determinado tipo de neurosis, de ninguna manera y por otra parte hay niños y adultos mucho mas influenciables que otros. Porque a veces los padres proyectan en sus hijos sus sueños incumplidos. Recuerdo hace unos años a una señora que utilizó sus influencias para que su hija entrara en el Teatro Colon para ser bailarina cuando la niña tenía varios kilos de más y encima no le gustaba la danza.
Ya Freud había señalado que “los padres no pueden impedir proyectar sus sueños mas importantes sobre sus hijos”, es decir que ahí donde ellos fracasaron sus hijos van a tener éxito, olvidándose que los niños tienen inclinaciones e intereses diferentes, porque son personas diferentes. Muchas veces cuando se dan cuenta que los niños no van a cumplir sus sueños se decepcionan y tal vez sin darse cuenta, denigran a sus hijos de manera sistemática. Pensemos que la palabra paterna no es cualquier palabra, sino la más importante que el niño pueda escuchar y entonces se imagina que efectivamente no sirve para gran cosa.
Otros padres en cambio son tan sobreprotectores que no les permiten hacer su propia experiencia. Ellos dan el mensaje de que la vida es muy peligrosa y esto genera mucha angustia e inestabilidad en los niños que no hacen prácticamente nada que genere el mínimo riesgo. Entonces más adelante en la vida, tienen muchas inhibiciones y miedos sin que puedan ligarlos aparentemente a nada, pero que impiden vivir una vida de acuerdo a sus deseos.
Otra situación que puede suceder es que los padres no hayan transmitido un ideal. Si por ejemplo alguien escucha de sus padres que el destino está marcado y que uno debe contentarse con lo que tiene, una vez adulto prefiere aburrirse con un trabajo mal pago que mudar por algo mejor pero que no le da seguridad. Porque lo que hace que queramos cambiar son los ideales interiores, pero para construirlos tuvo que haber padres que crean en uno y que nos animen a concretar los propios deseos.
Asi como la desvalorización es mala, la sobrevaloración también lo es, porque no permite tener una conciencia exacta de los potenciales de cada uno. Cuando los padres sobrevaloran a un niño, por lo general, siente que sus recursos son insuficientes para cumplir con semejantes expectativas y entonces fracasan.
Otra forma de desvalorización tiene que ver con los deseos parentales inconcientes, sobre todo cuando son hostiles, precisamente porque esos deseos no se pueden controlar. Estos son papas por lo general muy infantiles que ven que, cuando sus hijos triunfan, en lugar de sentirse orgullosos, los ven como rivales. Pensemos que puede pasar en el psiquismo de un niño frente a un problema de esta naturaleza, y entonces es ahí cuando se producen una serie de síntomas para no triunfar.
De todos modos, como decía antes, una vez adulto uno puede decidir hacer otra cosa con su vida o seguir culpando a sus padres por lo que no le dieron.

Buscar el equilibrio permanente

El equilibrio permanente en la vida no existe. Hay muchas personas que creen que lo permanente va a ser la solución a todos los problemas, cuando justamente la búsqueda de lo permanente muchas veces hace que nos equivoquemos y que tengamos complicaciones. Sabemos que el equilibrio constante que se adquiere de una vez y para siempre no existe dentro de lo viviente, mas bien uno encuentra algo que estabiliza en un momento pero que en otro eso mismo puede causar desestabilización. Esto es así porque los sentimientos y las emociones van cambiando y por lo tanto las necesidades de cada uno también van cambiando y son diferentes. Esto requiere de cada uno de nosotros flexibilidad, adaptación y también una capacidad de dejar ir en determinado momento eso que pensamos que era definitivo.
Decia una paciente “Tengo la impresión de que todo es superficial, no sé cómo comportarme, porque hay que ser lindo, inteligente y cumplir con un montón de mandatos. Hay muchas cosas que me gustan, pero la dificultad para conseguirlas me da miedo”.
El verdadero equilibrio esta justamente en aceptar que hay desequilibrio, porque alivia y da una cierta estabilidad reconocer que algunas veces podemos y otras no.
Pero hay una diferencia entre preguntarse por el sentido de la vida en cuanto a lo filosófico y cuál es el sentido que quiero darle a mi vida, son cosas distintas.
Una cosa es dejarse llevar por los mandatos sociales o familiares y otra es asumir la responsabilidad por el manejo de la propia vida y hacerse cargo de los propios deseos y las consecuencias que esto pueda tener. Esto quiere decir tomar decisiones de acuerdo a los valores, principios, prioridades, los sueños o las aspiraciones propias y hacer algo con eso. Claro que cuando uno busca vivir sin riesgos termina por no hacer nada y quedarse con las ganas.
Hay personas que tienen muchos recursos para desarrollar y así lograr tener una vida placentera, pero no lo hacen. Para poder resolver los miedos y la angustia que impide poner en valor todas las capacidades, es necesario realizar un trabajo interior para entender qué está pasando. Muchas veces el miedo al cambio es un freno poderoso, es por eso que cuando hay un conflicto entre nuestros deseos y nuestros actos es necesario hacer una consulta.
Cuando uno se pregunta sobre el sentido de la propia vida, ese es un signo de maduración, porque hay una toma de conciencia interna que hace que alguien pueda preguntarse sobre la responsabilidad de sus actos. La manera en que uno puede sentir que vive plenamente es tratando dentro de lo posible que se cumplan los sueños y asi tomar verdadera conciencia de la motivación personal, es decir por qué es importante para mi hacer tal cosa que deseo y no eso otro que se espera de mi, pero que no tiene nada que ver conmigo.
Muchas veces cuando los pacientes se quejan de que no encuentran placer en las cosas que hacen se les pregunta, que piensa que podría hacerlo feliz, cual es su sueño? Al principio no saben, pero luego de un tiempo de trabajo de análisis, pueden pensar en llevar a la práctica determinadas acciones que estaban reprimidas porque imaginaban que no iban a poder y que en un determinado momento pueden desplegarse.
Hay muchas personas que, ya grandes, dicen “y yo no hice tal cosa porque a mí de chico no me dejaron”. Es cierto que cuando los padres no alientan al niño la cosa se hace más difícil, pero esto no es motivo como para que una vez adulto continúe obedeciendo este mandato paterno y decida no tomar las riendas de su vida.
La confianza en uno mismo se conquista, es decir que hay que sortear todos los obstáculos externos y sobre todo los internos que cada uno encuentra en el curso de su vida. Pero si pensamos en una vida sin fallas estamos en problemas, porque todos tenemos nuestros fracasos, miedos y complejos, o sea que dudar de uno mismo y no tenerse confianza es inherente a la condición humana y los héroes que consiguen todo lo que quieren sin temblar no existen más que en la ficción.

TALLER DE REFLEXION GRATUITO AUTOESTIMA

AUTOESTIMA Y MIEDOS
Que es la autoestima? Como se forma?
¿Por qué supongo que los otros saben y pueden mas que yo mismo? Los miedos que paralizan


Coordina: Lic. Nelida B. Mograbi (Psicologa U.B.A.)
(Fund. del Periodico Actualidad Psicologica - Ex Coord. Hospital Pirovano, y CGPC Nº 1 – Gob. C. Bs As)


El objetivo de este taller es que cada uno pueda pensar en cómo se percibe
y a partir de eso transmite una imagen valorizada o desvalorizada de si.
A su vez la actividad grupal estructura; provee identidad y seguridad y satisface en parte nuestras necesidades de afecto, atencion y pertenencia. Saber que hay otros con los que compartir determinadas situaciones hace que la angustia disminuya.

Taller interactivo con metodologia enseñanza/aprendizaje basado en ejercicios practicos y vivenciales en el que se resaltan y comparten las experiencias aportadas por todos.

No necesita inscripción previa
Concurrir directamente el día del encuentro


Sabado 2 o Viernes 8 de marzo de 2013,
de 18 a 21 hs
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Lugar de Realización: Zona Tribunales C.A.B.A.

Informes: por cuestionesdementes@gmail.com o al tel. 4373-4671
Facebook: cuestiones de mentes
COSTO PROMOCIONAL POR SER EL PRIMER TALLER DEL AÑO $ 80,-(incluye lunch) Escuche el espacio CUESTIONES DE MENTES, con la Lic. Mograbi,
en el programa PRIMERA CITA,
todos los viernes a partir de las 02 hs. y sabados a las 0 hs por
Radio Cooperativa, AM770. www.radiocooperativa.com.ar