Es verdaderamente insoportable creerse engañado, reemplazado,y olvidado. Pero alguien celoso de su pareja tiene un deseo de posesión exclusiva hacia la persona amada y cree que ella le es infiel. Es decir que no cela tanto por lo que ve, sino por lo que se imagina. Es una mezcla de miedo y enojo, miedo de perder al ser amado y enojo por pensarla interesada en otros. Detrás de los celos se esconde un fuerte deseo de posesión y de control, ocultan mucha angustia. Este sentimientos lo manifiestan por igual los hombres y las mujeres, pero los hombres lo expresan por lo general de manera violenta, mientras que las mujeres celosas son mas curiosas y quieren saber todo de su rival, el color de los cabellos, si es delgada o mas gorda, sus gustos, como la conoció, etc.
Freud planteo que el sentir celos es algo normal en los seres humanos y que es una emoción que tiene sus orígenes en la infancia. Muchas veces dijimos que nos preocupamos mas por ser amados que por amar, y esto sucede desde muy pequeños; es mas, rivalizamos con nuestros hermanos por ser los preferidos de nuestros padres. Cuando llega un hermano menor, creemos que ya no nos quieren y nos sentimos abandonados y es ahí cuando nace este sentimiento y va a depender de la manera en que es tramitado, resuelto, y de cuanto nuestros padres nos ayuden a superarlos, como va a ser el comportamiento futuro. Estos celos en la vida adulta, señalan el miedo de perder algo de la propia integridad psíquica si mi pareja mira algo diferente, si mira otra cosa que no sea yo. Repito que todos somos un poco celosos en un momento de nuestra vida. Pero cuando los celos son irracionales nos están marcando que hay una autoestima muy baja.
La persona celosa duda no solo de la fidelidad del otro, sino y sobretodo de ella misma, de su físico, de su capacidad de seducción. Piensa que no merece el amor del otro. No podemos generalizar porque para cada uno los celos se despiertan de una manera diferente y por distintos motivos. Hay personas que en su diccionario personal entienden que amor y abandono tienen el mismo significado y en este caso es posible que hayan vivido en su infancia una situacion de pérdida amorosa de manera brutal y sin explicaciones y no hacen mas que repetir con sus pareja esos esquemas de comportamiento.
Sentir un poquito de celos es normal, pero hacer seguir a la pareja, controlarla, leerle los mensajes, investigar su ropa y encima imaginarla en brazos de otro, eso ya es patológico; porque las personas celosas buscan indicios de la supuesta traición, fantasean con un rival y entonces los celos ya se transforman en malditos. Porque muchas veces dominados por los celos puede venir el deseo de matar o de morir. Pero una cosa es quedarse con la fantasia y otra es llevarla a cabo. Muchos de los que matan luego se preguntan que es lo que me paso? La respuesta va a ser diferente para cada uno. Pero en general es engañoso y esconde muchas frustraciones y deseos inconfesables que vienen desde el fondo de nuestra infancia.
Lacan dice que el sufrimiento de los celos es necesario porque permite salir de la fusión con la madre, y tambien interviene en el trauma que se produce cuando nace un hermanito y esa es la prueba evidente de que ya no esta solo, que existe otro. Entonces todo depende de la manera en que esta herida fue vivida y como se resuelve, como se tramita. Algunos pueden soportar mejor que otros estas situaciones que marcan a fuego y entonces va a depender de esto que ningún amor sea sufíciente o que puedan o no confiar en alguien. Tambien los celos pueden deberse a un deseo personal de ser infiel que es proyectado sobre el otro y este es un fenómeno bastante común. Un joven que era un gran seductor cuando se casa se transforma en un individuo sumamente celoso. Su esposa para evitar problemas se viste muy sobriamente y se comporta sin provocación, pero sin embargo él hace escenas si la ve conversando con otro hombre. Y aquí podemos decir que para él el deseo es equivalente al pasaje al acto, y se siente culpable, rechaza su deseo de engañarla pero se lo atribuye a ella. Para muchos los celos son un acto de amor y si en algun momento el celoso para, es probable que el otro se lo reproche porque forma parte del placer del amor, ya que en un cierto grado erotiza y es como un afrodisiaco. Cuando los celos son excesivos la violencia del deseo se multiplica y se desea matar al rival. Por lo general este tipo de crímenes son mucho más violentos porque momentáneamente la persona pierde el razonamiento, tienen un comportamiento totalmente irracional, y agreden con lo que tienen en la mano. Hay algunas personas que tienen estrategias de protección y evitan amar, porque es la manera que encuentran para no ser traicionados.
En todos estos casos urge hacer una consulta para calmar esos pensamientos obsesivos que tornan la vida un calvario y a veces una tragedia.”.
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